Lo que sigue es, con toda probabilidad, la plancha más emocionante leída en nuestro taller hasta la fecha, es el trazado de una Hermana francesa que cuenta la historia tal y como ella la recibió de quienes fueron protagonistas en los años duros del final del franquismo. Muchas gracias Querida Hermana Edith

Venerable Maestra y todos vosotros hermanos y hermanas ,

Hoy voy a contarles una historia bien curiosa. Una historia que los de menos de cuarenta años no pueden conocer… esta historia, se la debemos a los recuerdos de nuestra hermana Micheline S., con algunos comentarios añadidos de nuestro hermano Alain C. puesto que los dos hicieron parte de los actores de los hechos.

En los años 1970, Franco se hacía viejo y todo el mundo veía venir el fin del régimen. Pero la dictadura estaba sólidamente implantada en España, y el sucesor designado por Franco era el general Carrero Blanco. El futuro Rey Juan Carlos estaba destinado à un poder de fachada.

El poder estaba en manos de los militares, la libertad de expresión y de opinión estaban prohibidas y la francmasonería hacia parte del olvido entre las torturas, los asesinatos y el exilio. La Guardia Civil hacía reinar el terror, pero el viejo dictador no moría todavía.

En aquellos años, la ciudad de Bayona contaba con numerosos refugiados españoles,  la inmensa mayoría republicanos, pero también algunos franquistas que habían huido de España cuando los republicanos, en 1936, habían conquistado su ciudad o pueblo. La organización vasca ETA gozaba en la época de numerosos apoyos en País Vasco norte, donde se admiraba su coraje y su resistencia. Este hecho iba a plantear numerosos problemas a la policía y al orden público entre la comunidad bayonense. La policía francesa vigilaba de cerca estas actividades ilícitas y la policía española intentaba con esmero infiltrarse en las redes de la resistencia, no vacilando en enviar a numerosos “topos” y comandos paramilitares en territorio francés. La mayoría del tiempo con la complicidad más bien benévola de las autoridades francesas un poco desbordadas por la agitación política del País Vasco. Y no vacilo en decirlo porque fui testigo.

Cuando un paramilitar español era identificado y detenido por los simpatizantes de la causa vasca y entregado a la policía francesa, con su coche que contenía una pistola del ejército español y algunas granadas, en el peor de los casos pasaba dos o tres días en la comisaría de Bayona, y luego era amablemente devuelto a las autoridades españolas… que lo liberaban inmediatamente. Esto para explicar el ambiente curioso que reinaba en nuestra ciudad. Es verdad, la prensa francesa condenaba unánimemente la dictadura, las manifestaciones antifranquistas desfilaban regularmente a través de las calles de la ciudad; los bayoneses participaban jovialmente en las fiestas de Pamplona e iban regularmente al mercado en Irún o San Sebastián. Las informaciones circulaban. Pero ningún miembro de la Resistencia estaba realmente al abrigo y los tiroteos que apuntaban a los refugiados españoles o a personas sospechadas de pertenecer a ETA estallaban regularmente a través de todo el territorio del País Vasco norte, hiriendo o matando a veces a inocentes de paso, como la pequeña niña de nueve años que fue alcanzada por tres balas en un café del “Petit Bayonne” dónde había venido para beber una coca cola  con sus padres. Para comprender la historia explicada por nuestra Hermana Micheline, hay que entender el contexto en el que se desarrollaba.

Y sin embargo, por muy increíble que esto pueda aparecer, una logia del Derecho Humano había conseguido volver a encender sus luces en Barcelona, en el secreto más grande por supuesto. Y un triángulo se creaba en Madrid. Los riesgos incurridos eran enormes. Pero la fe masónica todavía tenía algunas chispas entre los escombros de su hogar ibérico.

La Muy Ilustre Hermana Lucienne J. era la instigadora de esta renovación. Esta hermana de mas de ochenta años había sido condecorada con “la Légion d’honneur” por su participación en la resistencia en la segunda guerra mundial.  Habitante de Narbona, era normal que al principio dirigiera su mirada hacia Cataluña. Pero tenía la ambición de desarrollar la esperanza masónica en otras regiones de España. Para ello acudió al hermano y a la hermana Jacqueline y René A. Y es a esta pareja de francmasones que debemos el hecho de haber podido volver a encender las luces en 1969 de nuestra R.: L.: Unité,  después de algunos años en hibernación donde algunos hermanos y hermanas masones del Derecho Humano de Bayona tenían que ir a Pau para compartir los trabajos de la  Respetable Logia Les Enfants d’Hiram.

René trabajaba en la policía de fronteras. Jacqueline no trabajaba pero estaba muy investida en la actividad masónica. Ambos eran portadores del grado 31 o 32  y también crearon otras logias como Amour et Perseverance en Oriente de Périgueux. Tenían un apartamento en Biarritz pero no eran originarios de nuestra región. Y es directamente a partir de la sede internacional de nuestra obediencia que este proyecto ha sido llevado a cabo. Decidieron abrir una logia al Oriente de Irun-Fuenterrabia. Y para hacerlo, discretamente acudieron a los Hermanos y Hermanas de la logia Unidad que les parecían probablemente bastante intrépidos como para lanzarse a la aventura. Ya de entrada, aparecieron las dificultades de la puesta en práctica de esta logia: para empezar como establecer la sede en territorio español. Por supuesto no era cuestión de coger un local oficial… Los participantes pues decidieron organizarse en una logia ambulante que se reuniría en España cuando se podría y en Francia las otras veces, en los apartamentos de unos o otros.

¿ Cómo hacer conocer la francmasonería a los españoles? Para empezar apoyándose si era posible en los francmasones españoles inmigrados en Francia, y esperando poder iniciar a otros más tarde. Y justamente, una mujer española estaba miembro de nuestra logia Unité. Se llamaba Emilia C. y se convirtió en la primera Venerable Maestra de esta nueva logia. Con ella formaban parte la pareja A. que venía de Périgueux, Alain C., Micheline y Pierre S., el Hermanono: Jean D. que se incorporo bastante rápidamente, y otros todavía: una pareja muy motivada que venía de Ste Foy la Grande y que poseía un apartamento en Fuenterrabia, el Hermano y Hermana Jean Claude y  Martine L., del DH de Mont de Marsan. Un poco más tarde llegó el Hermano Rufino B., un español que vivía en Biarritz y era miembro del GODF. Nuestra Hermana Micheline se disculpa porque tiene miedo de haber olvidado algunos nombres. Le parece que otros todavía venían de Angoulême.

Así nació la logia ” La Luz Vuelve ” N°3 de la Federación española, de la voluntad de algunos de llevar la luz de la francmasonería hasta bajo la nariz de la dictadura. El día del encendido de las luces de la nueva logia Auzolan al Oriente de St Sébastien, en este año 2014, se les realizó un homenaje oficial, donde fue mostrada la carta constitutiva de la logia, ya que todavía existe y lleva el nombre de los fundadores, una carta que las instancias españolas del Derecho Humano acababan de descubrir. Había quedado a salvo en casa de nuestro Hermano Alain .

La logia La Luz Vuelve empezó sus trabajos en estas extrañas condiciones. La Hermana C. había traducido el ritual que era leído en español, pero el resto de los trabajos se realizaban en francés puesto que pocos de los fundadores eran capaces de expresarse en castellano. Se reunían a veces en casa de los S., a veces en otros apartamentos en Francia y a veces hasta en apartamentos españoles prestados por Hermanos o Hermanas. Pero el peligro estaba en su puerta. No había que golpear el mallete demasiado fuerte y también hacer las baterías rituales lo más despacio a causa de los vecinos del rellano. Así es como nuestro Hermano: Pierre S. pudo contarme uno de los miedos más grandes que ha pasado en su vida. Volvían de una tenida en Fuenterrabia. Tres personas en el coche: Pierre, Micheline y Jean D.

En el maletero, todo el material necesario para una tenida. Y durante el camino, se hacen
parar por un control de la Guardia Civil. ” Abran su maletero ” ordena al policía. Pierre no puede más que acatar la orden y el policía descubre los cordones, los mazos, los candelabros y otros objetos para el ritual. ” ¿ Qué son estos chismes? “, pregunta el policía. Pierre al que el corazón le iba a mil por hora, pero que no se desarmó por ello. ” Son decorados para una pieza de teatro que repetimos con unos amigos. Esperamos interpretarla para Navidad, y si usted quiere, puedo darle una invitación para asistir al espectáculo “…” Está bien, circulen ” responde el militar. ¡Uf! Un alivio indescriptible en el coche, pero nuestro Hermano: Jean  tuvo tanto miedo que hizo un infarto y acabó la noche en el hospital… Si el policía hubiera comprendido lo que eran estos objetos, posiblemente no habríamos visto de nuevo nuestros dos Hermanos y nuestra Hermana o en todo caso, no en buen estado…

Y al fin un día, el general Franco acabó por morir. Necesito su tiempo, pero la parca le atrapó a pesar de todo. Raramente he visto en mi buena ciudad de Bayona manifestar tanta alegría como aquella tarde. Bares abiertos toda la noche, champán gratuito en alguno de ellos, grandes fogatas en las plazas, y todos estos refugiados del sur que lloraban de felicidad. Un tiempo antes, los miembros de ETA habían hecho saltar por los aires a Carrero Blanco. Todas las miradas se dirigían ahora hacia el Rey Juan Carlos. Y éste, delante de las Cortes Generales hizo un discurso sorprendente, donde deseó el restablecimiento de la democracia, y en el que no cita ni una sola vez el nombre de Franco… Inimaginable unos días atrás, y sin embargo cierto. La historia de la Luz Vuelve se tendría que haber pasado al descubierto, pero en el País Vasco Sur la situación no era tan simple. A pesar de la abertura democrática de España, las tensiones eran todavía muy fuertes. La Guardia Civil seguía ejerciendo sus funciones. Los franquistas conservaban todavía bastantes poderes. La iglesia estaba bajo el control del Opus Dei. Y sigue siendo el caso por cierto. Y la ETA no ha dejado el combate, transformándose poco a poco en un movimiento considerado como terrorista y mafioso. Los policías del Sur y del Norte andaban de cabeza, los servicios secretos, muy activos, quería saber todo sobre las asociaciones locales, los miembros paramilitares del GAL continuaban sus exacciones sobre el territorio francés y los francmasones seguían sin sentirse en seguridad en el territorio español. La mayoría de la población o ignoraba todo de la francmasonería, o la tomaba por una institución del diablo.

La Herma Emilia  decide volver a España con su viejo padre, feliz a la idea de poder morir en su casa en Murcia. Nuestro Hermano Pierre  retoma el primer mallete. Pero los miembros estaban alejados los unos de los otros. A la logia le costaba reunirse. Y más todavía, cuando entonces sólo un hermano hablaba castellano. Pierre juzgó que esta logia ya no tenía su razón de existir si en ella se hablaba sólo en francés para los Hermanos y Hermanas franceses, y dimitió. Pero los otros no renunciaron. Iniciaron a una mujer: Madeleine, originaria de San Sebastián. La acompañaron de compañero a maestro. Para las ceremonias utilizaban el templo de Mont de Marsan o de Périgueux. ¿Por qué ir tan lejos? Descubrí más tarde, como ustedes en esta narración, que esta logia había permanecido secreta durante mucho tiempo, incluso después de la caída del franquismo, por orden de la Federación Internacional. En Bayona, las infiltraciones y las denuncias eran siempre posibles, policías y miembros de la DGSE (servicios secretos) eran francmasones. Los Venerables Maestros y los miembros de la logia Unidad ignoraban totalmente la existencia de La Luz Vuelve, un secreto que era difícil de vivir para los miembros que pertenecían a ambas. ¿Es que era consecuencia de la paranoia ambiente o es que era consecuencia de las consignas elementales de sabiduría para proteger a los masones que  ejercían en España? Probablemente había un poco de las dos. Nuestro Hermano Alain  se convirtió en Venerable Maestro de la logia. Se acordó de las precauciones que debió tomar para ir a hacer una encuesta en Irún. Aparcar su coche un poco lejos, entrar en un gran almacén y salir por otra puerta, vigilar la entrada del edificio dónde debía ir. El Hermano A., como buen policía, había dado consignas estrictas. Pero poco a poco, la motivación se difuminó, las disputas internas y las ambiciones personales llegaron a perturbar los trabajos. Circularon rumores en los pasos perdidos del templo de Bayona.

Algunos miembros de la Logia Unité se enteraron de la existencia de la logia secreta, con a veces algo de incomprensión frente a este secreto. Y sobre todo, la implantación en España no avanzaba. El obstáculo de la lengua se hizo cada día más agudo.

La Luz Vuelve acabaría por anular sus tenidas. ¿Podríamos creer que es un fracaso? Pues
bien, figúrese que sus trabajos encontraron una repercusión inesperada. Algunos Hermanos y Hermana de La Luz Vuelve después de la caída de la dictadura también fueron a Portugal para dar allí una conferencia sobre la francmasonería. En esa época, todos los portugueses aprendían el francés en la escuela, lo que facilitaba mucho las relaciones, y además la tradición masónica había quedado muchos más fuerte y viva en Portugal que en España. Los oficiales que dirigieron la revolución de los claveles eran casi todos francmasones. Nuestros Hermanos y Hermanas volvieron de Lisboa con 16 portugueses que pedían la iniciación. En dos días, en el templo de Mont de Marsan, fueron iniciados, pasados a compañeros y ascendidos a la maestría para poder abrir la Logia Libertad al Oriente de Lisboa. Los miembros de La Luz Vuelve fueron a visitarlos y a apoyarlos en Portugal. Crearon escuela. Otra logia pronto abrió en Oporto y podemos decir sin jactarse que la jurisdicción, convertida en federación del Derecho Humano, proviene en una gran medida, de la energía y del coraje que nuestros Hermanos y Hermanas.: dedicaron con el fin de luchar contra el oscurantismo y hacer renacer la luz de la francmasonería, como lo indica el bonito nombre que lleva esta logia LA LUZ VUELVE discreta, efímera, pero siempre viva en el corazón de los masones de Bayona y espero más particularmente todavía en el de los Hermanos y Hermanas que recogieron el testigo y encendieron este año las luces de esa nueva logia del  Derecho Humano,  la Respetable Logia Auzolan al Oriente de San Sebastián.